Aunque hay muchos tratamientos para las pulgas que son seguros y efectivos tanto para los gatos adultos como para los gatitos de 4 semanas y más, los gatos más jóvenes son igual de susceptibles a las infestaciones de pulgas. Los gatitos muy pequeños, de hecho, tienen un riesgo más grande que los mayores de desarrollar una anemia relacionada con las pulgas.
Si tu pequeño gatito está infectado por pulgas, prueba con algún control natural hasta que el pequeño esté listo para una medicación comercial.
Algunos tratamientos comerciales contra las pulgas para gatitos
Las tabletas Capstar y Program son medicaciones para gatitos de hasta 4 semanas y 2 libras (1 kg). Disimula la tableta en su comida o dásela en la boca. Trata a todas tus otras mascotas que podrían haber sido infestadas por pulgas.
Revolution, ProMeris y Advantage son tratamientos tópicos directos y seguros para usar en gatitos de 6 a 8 semanas de edad. Aplícalos separando el pelo en la parte de atrás del cuello del gatito y vaciando la ampolla sobre su piel. Su efecto dura entre 4 y 7 semanas.
Rociar mensualmente a tu gatito con Frontline matará las pulgas en crías de 8 semanas y más.
El peine para pulgas
Si tu gatito es demasiado joven o demasiado pequeño para la medicación contra las pulgas, un peine para pulgas removerá la mayoría de ellas. Compra uno en tu tienda de mascotas. Atrapará las pulgas junto con el pelo suelto del gatito.
Antes de peinarlo, llena parcialmente una jarra o recipiente con agua tibia donde sumergir el peine después de cada pasada. Peina el gatito entero hasta que no salgan más pulgas en el peine. Arroja el agua sucia por el inodoro y prepáralo para el champú.
Usar champú en tu gatito
Cualquier gato, sin importar lo pequeño que sea, puede resistirse a un baño. Usa un champú suave antilágrimas para gatos.
Ten todo listo antes de comenzar. Usa una pileta pequeña y pon una alfombra de goma para que tu gatito no se resbale. Llénala sólo lo suficiente como para mojar su panza. Ten tu peine para pulgas a mano junto con dos toallas listo para envolver y secar al gatito cuando termine el baño.
Utiliza agua que se sienta apenas tibia. La temperatura de los gatitos es de 101,4 grados F (38,56 ºC), casi 3 grados más caliente que la tuya. Mójalo muy lentamente, y aplica una gota de champú del tamaño de una moneda pequeña en la palma de tu mano, enjabonando su cuello. Esto desanimará a las pulgas de irse a su cabeza y orejas.
Como las pulgas se dirigen a su cuello, péinalas hacia el agua, donde se ahogarán. Enjabona amablemente hasta que esté completamente cubierto. Evita meter jabón en su boca y ojos. Luego, enjuágalo con agua tibia hasta que no haya más jabón, y repite el enjuague para quitar cualquier resabio.
Envuélvelo en una toalla, y sécalo con cuidado. Repite con una segunda toalla. Si tiene el pelo largo, termina de secarlo con un secador de pelo en mínimo y peinándolo para evitar enredos.
Control de pulgas
Quita las larvas de pulgas de los lugares donde tu gatito duerme, dice UC Davis, para reducir las chances de reinfestación. Lava su cama con jabón y agua caliente semanalmente.
Aspira pisos, cortinas, tapizados y grietas alrededor de tus zócalos y armarios al menos día por medio. Vacía la bolsa de la aspiradora o sella su bolsa en una bolsa plástica de basura y ponla fuera para evitar que las pulgas reinfesten tu hogar.